Rutas templarias

Castillo de Pulpis

El castillo de Pulpis, también llamado de Polpis por aquello de las lenguas y lenguajes autóctonos y oficiales, es una edificación de origen musulmán pero enclavado en la zona del Maestrazgo castellonés y bien conservado en la parte que queda hacia la Ermita de San Antonio.

Es de fácil acceso si accedes por la localidad de Santa Magdalena pero como casi todo el mundo accederás desde la localidad de Peñíscola, y si puedes hazlo desde otro castillo, claro, el de Peñíscola. Las vistas te va a encantar. Y si sales de madrugada verás el sol naciente haciendo que la Sierra de Irta vibre y aplauda al ebrio Helios.

Del castillo del Papa Luna a la Ermita

Un repecho liviano y sano para empezar, ya has calentado por el camino de la carrtera paralela al mar, así que tus piernas ya van casi solas. Además las vistas te premian con solo volverte de a tu derecha.

Toparás con ciclistas mañaneros, pero en general poco caminante , en San Antoni puedes meterte unas viandas que hay unas mesas bien preparadas. Además te recomiendo el acceso a una construcción circular en la Ermita que de curioso tiene lo fresco y lo meditable.

Has hecho ya casi lo más difícil y has dejado atrás los complejos y las construcciones que han arañado Irta de sobremanera. Ahora ya vas a caminar por monte mediterráneo que al ser menos seco que lo que vemos en Aragón te sorprenden plantas de hoja más jugosa que el bajo monte bajo.

Fauna

Escurridiza a priori a la vista, pero llena de reptiles de rápida fuga. Además me encontré allí una tortuga, más seca que la mojama.

El bosque

Avanzas rápido pero el castillo no se vé está rodeado de bosque . Antes un mirado más para ver el mar de lejos y la impresionante fortaleza de Peñíscola. Evocas un pasado templario, lleno de la dureza de la época y te viene a la mente lo que pensaría el viajero cuando viera aquella fortaleza. Todo el camino está lleno de historia

Pero el bosque se abre para encontrar por fin la fortaleza de Pulpis. Bajada pronunciada, que luego tendrás que subir, recuerda …

Castillo abandonado

La pena te invade puesto que ves otra joya de la historia que no se cuida pero aun asi la torre y una parte de la muralla están muy bien conservadas. El acceso muy empedregado y las vistas al valle previo al denso maestrazgo que se adentra hacia tierras turolenses. El medievo está ahí. Se huele.

En resumen

Camino más o menos sencillo para hacer en familia en 5 o 6 horas, quizá un poco más si te deleitas como el que escribe en los paisajes y los detalles. No llegas a hacer 20 km.

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